Por fin algo,
Un motivo para vencer el síndrome de la hoja en blanco,
De nuevo se llenan los labios de palabras y besos,
De nuevo se llenan las páginas de versos dedicados,
Una vez mas, pero como si fuera la primera,
La ilusión se mezcla con el miedo, y las palabras con besos.
Y no es necesario más que un mensaje, traído por una paloma digital,
Para sacar una sonrisa de un manojo de nervios,
Y unas manos tersas que acarician nubes llenas de ilusiones,
Para abrir las puertas a el mundo de NuncaJamas,
Y unas orejas pequeñas, atentas y dulces,
Para hacerme escuchar besos con hambre.